Autor : Andrés Felipe Ramos Gámez
Debido a las intensas lluvias, las viviendas se inundan de aguas negras.
La situación más grave se presenta en la calle 30A 20 donde se han visto perjudicadas 10 viviendas, ya que el agua se rebosa, ingresa por las puertas, alcanza hasta un metro de altura y daña las pertenencias de los residentes.
Así mismo, se expone la salud por los malos olores, el excremento y la humedad que deja.
Diana Lucía Ramos Pérez es una de las habitantes perjudicadas con la situación, ella manifestó que una de las causas de esta problemática es la tubería colapsada en el asentamiento Milagro de Dios, además de los residuos que afectaron los desagües.
“Nos dicen de la alcaldía y de EPA que esa es una causa, pero ya estamos cansados de la misma respuesta, ‘que están estudiando la situación’, necesitamos que vengan y nos solucionen este problema que nos tiene desesperados”.
Ella habita una vivienda junto con otros 4 adultos, 2 de ellos son de la tercera edad y se han visto en serio riesgo: “El agua ya alcanza el nivel de los colchones, su salud se afectó, a eso hay que agregarle que nuestros muebles y demás pertenencias se están dañando por el efecto del agua, la humedad y el mal olor”.
Otro de los habitantes del Cincuentenario que tiene problemas con las inundaciones es Luis Emilio González, quien habita con otras 3 personas mayores, una de ellas está en condición de discapacidad: “Cada rato se nos entra el agua, acá aún está mojado el piso y estamos cansados de lo mismo y más de la falta de atención de las autoridades”.
El problema, de acuerdo con los residentes, es frecuente desde noviembre de 2021, por lo que algunos vecinos optaron por construir muros para evitar el ingreso de las aguas negras.
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