Autor : Natalia Ospina Duque
Luis Mendieta aseguró que el Esmad no debe desaparecer y que, por el contrario, debe ser reforzado para garantizar la seguridad de los colombianos buenos.
El general (r.) Luis Herlindo Mendieta Ovalle, en diálogo con LA CRÓNICA se refirió a la Justicia Especial para la Paz, JEP, a la primera línea y a la poca representación de las víctimas en el Congreso de la República.
El oficial retirado de la Policía encuentra haciendo una correría por el país con el objetivo de recoger las inquietudes y testimonios de las víctimas de las Farc.
“Recordemos que desde hace más o menos 4 años iniciamos varias actividades y se fundó La Federación de Víctimas de las Farc, de la mano del periodista Herbin Hoyos —quien lastimosamente falleció—, quien con su programa ‘Voces del Secuestro’ nos acompañó con tantos mensajes mientras estábamos en cautiverio.
Secuestro
El primero de noviembre del año 1998, Mendieta Ovalle, que para ese entonces ostentaba el grado de teniente coronel, fue secuestrado por las Farc, en la toma de Mitú.
“Por 11 años, 7 meses y 12 días estuve internado en la selva, recluido en jaulas de concentración, con cadenas y candados atados al cuello y a las manos, amarrado en árboles. Imagínese transitando por la selva en esas condiciones infrahumanas, sometido a tratos crueles, inhumanos. Estuve transitando por barrizales, terrenos inhóspitos, afrontando toda clase de peligros, con dificultades en la alimentación, sin la opción de un médico”, narró.
Para referirse a la falta de humanidad de los miembros de las Farc, se refirió a 2 casos que marcaron el corazón de los colombianos. Uno fue el caso de Luis Eduardo Peña Bonilla quien presentó problemas siquiátricos.
“En ese tiempo estaba alias ‘Sombra’, se le insistió mucho sobre la atención médica que requería, pero lo que hizo fue sacarlo, fusilarlo, y hasta el día de hoy la familia desconoce la ubicación del cuerpo”, dijo.
Y agregó: “El otro caso es el del capitán Julián Ernesto Guevara, que murió en cautiverio por las condiciones en las que estaba y nunca recibió atención médica. Son 2 casos que muestra la crueldad del actuar de las Farc, de la inhumanidad que mostraron”.
Negociaciones en La Habana
El general Mendieta aseguró que infortunadamente la paz se negoció bajo el principio de que el Estado era el victimario y las Farc eran las víctimas
“Con las víctimas se quería, en su momento, ocultar sus testimonios como si esos crímenes no hubiesen existido. Yo insistía que fueran más representantes de las víctimas, porque la intervención después de mi elección, fue de 15 minutos únicamente, y de acuerdo con las reglas de juego, era manifestar el caso personal”.
En esas instancias recibió el clamor de la gente para que hablara por ellos y les exigiera a las Farc, información de los más de 700 secuestrados y de los cuales nunca supieron nada.
“En esos momentos ni las víctimas ni los familiares podían hablar, temían por las represalias”.
Violencia de lo rural a las ciudades
Recordó que durante ese secuestro, estando en las jaulas, hizo presencia el ‘Mono Jojoy’ y advirtió que la guerra se trasladaría a las ciudades.
“Era el tiempo de la negociación con el expresidente Andrés Pastrana, y, en su momento, pensaron que iba a tener un resultado positivo y que los miembros de las Farc iban a salir a hacer política. Pero lo mejor que pudo pasar en ese momento, fue que el presidente Pastrana terminara el proceso”.
Mendieta Ovalle dijo que en ese asalto a Mitú y a todas esas poblaciones, siempre se hablaba de la primera línea, que era constituida por menores de edad y jóvenes que eran reclutados, entrenados en disparar y en manipular artefactos explosivos, en lanzar cilindros bombas contra las estaciones policiales.
“Hoy vemos cómo hace unos meses se creó una primera línea cuyo objetivo es hacer el vandalismo, atacando los CAI, quemando y agrediendo a los policías, para destruir, incendiar y saquear los comercios, haciendo bloqueos, no permitiendo el paso de ambulancias, un sinnúmero de delitos, es decir, parece una primera línea como de las Farc”.
Indicó que esta primera línea se está justificando en el derecho a la protesta, pero están cometiendo delitos que podrían ser de carácter internacional, y que espera que la justicia tenga herramientas jurídicas para poder judicializar.
Representación de las víctimas en el Congreso
El oficial dijo que está haciendo un trabajo articulado a nivel nacional con los integrantes de las reservas activas de la fuerza pública y un grueso de las víctimas de las Farc, para poder tener una representación en la Cámara alta.
“No es justo que a esos victimarios se les haya concedido 10 curules en el Congreso de la República y que ahora, gracias a un fallo de la Corte Constitucional vayan a tener 16 más, es decir, 26 curules en total y con sectores de la izquierda van a ser mayoría, y van a dominar el Congreso, eso no lo podemos permitir. Entre tanto, las víctimas tienen que salir a la calle, para buscar un voto y tener representación en el Congreso y los bandidos ganándose la lotería”.
Reforma a la Policía
Sobre la reforma a la Policía, dijo que desde el gobierno de César Gaviria se ha hablado de una reforma, en la que buscaban una nivelación salarial de los miembros de las fuerzas públicas, pero que esto nunca se dio.
“Estos acuerdos los cumplieron con la rama judicial y con los maestros, pero con los servidores públicos que colocan el pecho todos los días no se ha hecho. Para que un patrullero sea ascendido deben pasar 14 años, cuando debería ser a los 6 años, este esfuerzo se les debería reconocer con una prima de servicios.
Con respecto al Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, aseguró que no debe desaparecer.
“El Esmad se debe fortalecer, antes teníamos un casco y un escudo, en varias ocasiones me lesionaron en disturbios estudiantiles. Ellos entran en una protesta cuando deja de ser pacífica y lo hacen para garantizar las libertades de las personas de bien”.
Falsos positivos
Aseguró que es necesario reformar la justicia, hay muchas cortes y tribunales, mucha burocracia y deberían tener más fiscales para que los procesos avancen.
Frente a los casos de falsos positivos dijo: “Yo creo que las estadísticas van a variar, según la competencia y quién las diga. Hay muchos casos de falsos positivos que han trabajado los colectivos de abogados de la izquierda. En la JEP tienen que confesar delitos para recibir beneficios, así que se atribuyen crímenes que no cometieron para sacar ganancias”.
Quiere ser senador porque asegura que las Farc está ocupando mucho lugar en el gobierno y quiere hacer contrapeso a esto y contrarrestar ideologías izquierdistas y defender el estado de derecho.
Dijo que quiere “evitar un estado comunista” y que es el momento para que las víctimas tengan un lugar en el Congreso y dejen de ser pisoteadas, como ha pasado en los últimos años.
