Las opiniones expresadas por los columnistas son de su total y absoluta responsabilidad personal, no compromete la línea editorial ni periodística de LA CRÓNICA S. A. S.
Colombia es un país lleno de oportunidades, donde la mayor parte de sus ingresos provienen de productos del sector agropecuario, el cual es trabajado como una escultura por los campesinos. La palabra campesino debe tener el mismo valor que la tienen un médico, abogado, administrador, ingeniero, científico, etc. Sin los campesinos, los millones de colombianos nos moriríamos de hambre, son la clave del sustento de cada persona tanto en el país como en el exterior, la pandemia lo mostró, dependíamos de ellos y la economía lo mostró donde el PIB bajó del 7 al 2.3 %.
En un país con 114 millones de hectáreas, con un potencial a sembrar son 39.2 millones de has. lo que equivale al 34 % y donde solo 5.3 millones de has. están sembradas apenas el 13.5 %, en el país se producen 220 alimentos en 32 departamentos desde cereales, frutas, hortalizas, tubérculos, plátanos y otros más. En regiones que son líderes como Antioquia, Valle del Cauca, Tolima, Cundinamarca, Meta y Nariño que representan el 42 % del total del área rural. La columna de hoy es un homenaje a los 15.2 millones de campesinos que representan el 30 % de los colombianos, según el Dane y la Upra, de los cuales 5.8 millones son mujeres, sin los cuales no podríamos vivir. Pero el campo debe dar un giro: de fincas a empresas que permitan generar productos con valor agregado y mejorar la calidad de vida de los campesinos, por lo tanto, Colombia debe llegar a tener una agricultura planificada nacionalmente y de precisión como la que tienen países líderes como EE. UU., Canadá. Australia y Argentina. Más en un planeta que se ve afectado por el calentamiento global con pérdidas de cosechas por sequía y falta de forrajes para animales.
El campo colombiano se ve afectado por un estancamiento en su crecimiento, con una inflación de alimentos, con mayor pobreza que en la zona urbana, por lo tanto, se requiere un unir los gremios nacionales y regionales que permitan desarrollar tecnología, extensión rural, encadenamientos productivos, incentivos a la producción y crédito que lo desarrolle. Es necesario que la Comisión Nacional de Crédito Agropecuario genere una política de financiamiento para pequeños, medianos y grandes ya que solo el 20 % tiene acceso a estos créditos, la Federación Nacional de Cafeteros es clave en el desarrollo del sector agropecuario con sus inversiones en infraestructura y transferencia tecnología, a la igual manera los gremios organizados del país que unen diferentes sectores agrícolas. Se hace necesario tener seguros apoyados por el estado para la producción agrícola que puede verse afectada por inundaciones, cambios climáticos, lluvias que ponen en riesgo el patrimonio del campesino donde se vive de esa actividad. Felicitaciones en el día del Campesino a los empresarios y emprendedores del campo hombres y mujeres. Y usted ¿cómo apoya a los campesinos?