“Más allá de satanizar la competencia, a la luz de esta tragedia, es imperativo que se tomen medidas inmediatas para mejorar la seguridad en eventos similares en el futuro”.
El fatídico incidente del pasado domingo en la Copa Trepadores que cobró la vida de Lised Mejía Serna y dejó a doce espectadores heridos nos recuerda de manera dolorosa la importancia primordial de la seguridad en eventos deportivos y recreativos.
Lised, una joven de tan solo 23 años, perdió su vida en un evento que debería haber sido una celebración de deporte y camaradería.
Aunque la Copa Trepadores Quindío tiene una tradición de más de una década, eso no garantiza que se hayan cumplido rigurosamente las medidas de seguridad necesarias. Los videos disponibles muestran a espectadores ubicados en lugares vulnerables, con apenas alambre de púas como protección. La falta de barreras adecuadas entre la pista y los espectadores es un claro indicador de que se pudieron haber subestimado los riesgos potenciales.
La aprobación de la alcaldía de Buenavista y la presencia del gobernador en el inicio del evento no eximen de responsabilidad a quienes organizaron la competición. La seguridad de los espectadores debe ser una prioridad absoluta, y no puede sacrificarse en aras de la emoción o la tradición.
Es necesario que las investigaciones vayan más allá de determinar las causas inmediatas del accidente. Deben examinarse a fondo los protocolos de seguridad empleados, identificar posibles fallas en su implementación y establecer medidas preventivas para evitar que tragedias como esta vuelvan a ocurrir.
En este punto vale la pena preguntar en quién recaía la responsabilidad de reubicar a los espectadores que estaban en zonas no aptas para ver la carrera y qué tan bien señalado estaba el circuito para que el público tuviera claro dónde ubicarse.
Más allá de satanizar la competencia, a la luz de esta tragedia, es imperativo que se tomen medidas inmediatas para mejorar la seguridad en eventos similares en el futuro. Esto incluye la implementación de barreras físicas adecuadas entre la pista y los espectadores, así como la designación de áreas seguras claramente definidas para el público. Además, es fundamental que se realicen inspecciones exhaustivas de los circuitos antes de cada evento para identificar y mitigar posibles riesgos.
En este momento de duelo y reflexión, extendemos nuestras más sinceras condolencias a la familia y seres queridos de Lised Mejía Serna. Su trágica pérdida nos recuerda la importancia de actuar con diligencia y responsabilidad en la protección de la vida humana.
