Autor : Natalia Trujillo Varela
Desde hace 15 años, a través de su colectivo Plasmarte, enseña y despierta el arte en personas de todas las edades, sin importar su contexto socioeconómico.
Wilson González Hernández, un artista plástico visual contemporáneo con más de 37 años de experiencia, ha dedicado su vida al arte desde una edad temprana. Hace 15 años, fundó el colectivo Plasmarte, con el cual busca descubrir y desarrollar talentos ocultos en personas de todas las edades y contextos sociales. Su trabajo se centra en utilizar el arte como una herramienta de transformación personal y social.
¿Cómo y cuándo empezó su gusto por el arte?
Desde los 5 años comencé a dibujar sin conocimientos previos. A los 7 años, gané un concurso escolar dibujando al Tío Sam, lo cual me motivó mucho. Aunque perdí a mis padres a temprana edad y no pude ingresar a una academia, fui autodidacta. Visitaba bibliotecas y fotocopiaba libros para aprender técnicas por mi cuenta.
¿Cuál es su objetivo al enseñar arte y por qué se enfoca en el arte social?
Quiero descubrir talentos ocultos y ayudar a las personas a encontrar un camino positivo a través del arte. El arte puede transformar vidas, ofreciendo una alternativa a quienes enfrentan problemas de adicción o delitos.
¿Cómo comenzó su trabajo en la cárcel de mujeres Villa Cristina de Armenia?
Hace cinco años llegué a Armenia y el año pasado me contacté con la directora de la cárcel, Tatiana Jiménez Arcila. Le propuse impartir talleres artísticos a las internas. Con el dinero de la venta de mis obras, compro materiales básicos como lápices y carboncillos para los talleres. Aunque faltan recursos, hemos descubierto grandes talentos.
¿Cuál es su técnica especial?
Me especializo en el dibujo sobre lienzo, incorporando colores para crear nuevos tonos. También he trabajado en puntillismo, una técnica que requiere mucha paciencia y tiempo. Además, me interesa la anatomía humana y he perfeccionado mis habilidades en este ámbito.
¿Es el arte fácil o difícil?
El arte es complicado, similar a la escritura o la composición musical. Requiere práctica constante y enfrentarse a desafíos, pero es una actividad liberadora y reveladora.
¿Cómo ve el estado del arte en Colombia hoy?
Estamos atrasados. El arte contemporáneo ha cambiado mucho y ya no se utiliza tanto el caballete ni la perspectiva tradicional. Necesitamos volver a apreciar las técnicas clásicas.
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¿Cómo se puede promover más el arte entre las personas?
La educación artística debe comenzar en casa y continuar en las escuelas. Es crucial que los niños descubran y desarrollen su talento desde temprana edad, alejándolos de los dispositivos electrónicos. Debemos organizar actividades culturales y artísticas, enseñando manualidades y técnicas artísticas a niños y adultos por igual.
