Autor : Daniel Restrepo Tabares
La producción y exportaciones crecieron significativamente, mientras que las importaciones cayeron un 72 %.
En julio, el café colombiano alcanzó un valor récord de $1,29 billones (+52 % vs. 2023).
En su cuenta de X, el gerente general de la Federación Nacional de Cafeteros, Germán Bahamón Jaramillo, informó que el café apunta a la reactivación económica. Según el directivo hace 20 meses no se experimentaba un mes con un valor del producto agrícola cafetero como el registrado el pasado mes de julio, cuando se alcanzó $1,29 billones, lo que representa un incremento del 52 % en comparación con julio de 2023.
De esta manera, el valor de la cosecha cafetera en los últimos 12 meses se sitúa en $11,0 billones, cifra que supera el valor de la cosecha del año calendario 2021. La producción colombiana de café en el mes de julio registró un crecimiento del 22 % en comparación con el mismo mes de 2023.
Con este buen comportamiento al finalizar la primera cosecha, Colombia alcanza 12,35 millones de sacos en los últimos 12 meses, lo que representa un crecimiento del 16 % año a año. En los 10 meses del año cafetero (octubre-julio), la cifra refleja un +20% de crecimiento.
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En cuanto al volumen de exportaciones de café, Bahamón Jaramillo indicó que Colombia ha experimentado un crecimiento del 10,8 % en los últimos 12 meses, apoyado por un crecimiento del 18 % en el mes de julio de 2024. En lo corrido del año hasta la fecha, las exportaciones totales de café colombiano alcanzan 6,74 millones de sacos, logrando un crecimiento del 15 %.
Finalmente, Bahamón Jaramillo destacó que las importaciones de café en el mes de julio decrecieron dramáticamente en un -72 % en comparación con el mismo mes en 2023. El acumulado de las importaciones de los últimos 12 meses es de 1,1 millones de sacos, lo cual representa una reducción del -51% en el año móvil, alcanzando el nivel más bajo de los últimos 4 años.
“Estos resultados no solo destacan la fortaleza del sector cafetero colombiano, sino también el esfuerzo continuo de los caficultores por mantener y mejorar la calidad del producto. Las cifras reflejan una respuesta positiva del mercado internacional ante la calidad del café colombiano, lo que ha permitido incrementar tanto las exportaciones como el valor de la cosecha”, manifestó el líder gremial.
Dijo que la significativa reducción en las importaciones de café destaca la autosuficiencia del país en la producción del grano, disminuyendo la necesidad de importar producto y fortaleciendo la economía local. Esta tendencia a la baja en las importaciones podría ser una señal de que la industria nacional está cubriendo de manera más eficiente la demanda interna y externa.
El crecimiento en la producción y las exportaciones también tiene un impacto positivo en las regiones cafetaleras, donde se están generando más empleos y mejorando la calidad de vida de las familias que dependen del café. En este contexto, el papel de la Federación Nacional de Cafeteros ha sido clave en la implementación de estrategias que fomentan la sostenibilidad y el crecimiento del sector.
