Autor : María Angélica Molina Martínez
En épocas de pandemia hubo hasta 24 muertos en un solo día y en lo que va del 2023 se han reportado 7 fallecidos, afirmó especialista en medicina interna y miembro de la mesa Covid-19.
Dolores musculares, problemas respiratorios y cansancio crónico son los síntomas más frecuentes entre personas que tuvieron el coronavirus, médicos explican sus causas.
El próximo 18 de marzo se cumplen 3 años desde el primer caso diagnosticado de Covid-19 en el Quindío. Desde ese día al 10 de marzo de 2023 -fecha del último boletín oficial- van 74.897 casos reportados en el departamento. Luego de la crisis social, económica y sanitaria generada por el virus, hoy las cifras son bajas, en lo que va del 2023 se han confirmado 237 personas contagiadas, de las cuales 6 fallecieron.
Sin embargo, NUEVA CRÓNICA QUINDÍO contactó a 4 personas que, al día de hoy, luego de varios meses o incluso años de haber superado el contagio inicial, continúan sufriendo los estragos de la enfermedad.
Luis Fernando Araque Loaiza relató que en el año 2020 fue diagnosticado con Covid-19; después de hacer unas compras y llegar a su casa, empezó a sentirse fatigado. “Tenía desaliento en el cuerpo, escalofríos, me dio fiebre en el transcurso de la tarde, mientras eso también sentía dolor en todo el cuerpo”.
Solía portar su tapabocas y se desinfectaba constantemente las manos, las prendas y los zapatos. “Yo era muy cuidadoso porque había escuchado de varios casos de personas que estaban muy enfermas y habían sido hospitalizadas, entonces no quería que ni a mí ni a mi familia les tocara pasar por eso”.
Tomó muchos medicamentos para la “gripa” e incluso se aplicó inyecciones para disminuir los síntomas, pero ningún método funcionó. “Al ver que no mejoraba fui al hospital para hacerme la prueba PCR y cuando me entregaron los resultados confirmé que tenía Covid-19”.
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Después de haber padecido la enfermedad durante varias semanas pudo recuperarse sin infectar a la familia, pues estuvo aislado en una habitación. Sin embargo, hoy sigue afrontando las secuelas. “Desde entonces siento mucho frío en la noche, me duelen las articulaciones y los músculos, por épocas, y también quedé con mucho dolor de cabeza”.
Aurora Bueno Dávila se contagió de Covid-19 hace 7 meses: “Tenía los síntomas más recurrentes de la enfermedad, como dolor de garganta, de cuerpo y de cabeza, fiebre y perdí el olfato y gusto durante 15 días”.
Ella ya contaba con las 3 vacunas que estaban siendo requeridas en ese momento, pero los dolores y la dificultad para respirar iban en incremento día tras día. A pesar del susto, superó la fase crítica, pero quedó con secuelas como agotamiento crónico durante un tiempo, lo que la llevó a tomar vitaminas especiales
Durante la época de pandemia, Sandra Milena Restrepo Echeverry se contagió en su lugar de trabajo de Covid-19 cuando debía realizar oficios con una compañera de trabajo que no portaba su tapabocas, al ser escéptica frente a la enfermedad.
“Me realicé una prueba PCR para comprobar lo que ya sabía y duré casi 20 días o un mes con los síntomas”. Sin embargo, desde esa época sufre de dolores de cabeza y fatiga, padecimientos que iniciaron justo en el momento de haberse contagiado y que aún persisten en su vida.
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Poscovid
Sobre las secuelas de los anteriores casos, el doctor Jorge Luis Duque Valencia, médico cirujano y decano de la facultad de Ciencias de la Salud en la Universidad del Quindío, aseguró que hoy en día, se están presentando muchas situaciones a causa de la Covid-19 y la poscovid-19.
“Aunque aún están en estudio, luego del Covid-19 se están presentando enfermedades como diabetes tipo 1 -que puede activar un estado de susceptibilidad para la diabetes tipo 2- también algunas enfermedades autoinmunes. Hay además afectaciones de manifestaciones poscovid, es decir, después de 4 o 12 semanas de que el periodo crítico haya pasado las personas presentan condiciones clínicas como síndromes de dolor, de mialgias, artralgias, dolor articular, enfermedades mentales tales como depresión, ansiedad, polineuropatías, enfermedades pulmonares importantes y, a veces, crónicas, enfermedades con afectaciones en el corazón, miocarditis y falla cardiaca. Yo diría que un 10 % podría quedar con esas manifestaciones de poscovid a nivel mundial”.
No obstante, el médico explicó que en su mayoría podrían recuperarse, pero hay enfermedades que tienen desarrollos complejos, como lo es una miocarditis severa, que puede dejar un músculo afectado del corazón y con fallas cardiacas. “Sin embargo, podría decir que la mayoría de estas afectaciones se pueden curar”.
Duque Valencia continuó diciendo que desde la aparición de los primeros casos empezaron a ver cómo muchas personas no se recuperaban como suele pasar con una gripa habitual.
Entonces, para combatir estas secuelas “se han usado cócteles de complementos con vitamina B, algunas veces se usan corticoides, cócteles con vitamina D, antiinflamatorios, pero no se sabe si definitivamente una enfermedad cura o no cura. En la práctica clínica realizamos ciclos con esteroides, ciclos con complejo B de alta dosis, y los pacientes efectivamente mejoran, pero no podemos decir nada concluyente”.
Por otro lado, según lo dicho por Duque Valencia, los casos de contagio son de población adulta joven y los adultos mayores que han estado en cuidado intensivo son los que más sufren con afectaciones pulmonares, respiratorias y renales.
Por su parte, Jorge Enrique Gómez Marín, profesor titular de la facultad de Ciencias de Salud de la Universidad del Quindío, dijo que las terapias respiratorias han sido muy utilizadas para disminuir los efectos de la Covid en algunas personas. “No obstante, hay un porcentaje de pacientes que quedan con algo llamado invalidez respiratoria y pueden necesitar apoyo con oxígeno suplementario”. Así mismo, son muy solicitados los internistas para atender problemas de cansancio crónico por personas que sufren de secuelas.
Por otro lado, el médico Gregorio Sánchez Vallejo, especialista en medicina interna y miembro de la mesa Covid-19, aseguró que las comorbilidades no se vieron afectadas directamente por la Covid, sino que por esa época las personas no tuvieron los controles adecuados por las circunstancias de la pandemia. “Había casi que descuidar las otras enfermedades porque no había citas, ni camas, etc. Lo que produjo un descontrol de las comorbilidades en un 30 o 40 %”.
