Autor : Daniel Restrepo Tabares
Tras avistarla en uno de sus recorridos, Sergio Cruz logró capturar la musaraña y realizarle un registro audiovisual. Foto : Cortesía Sergio Cruz Suazo
El hallazgo de este animal se constituye en un acontecimiento importante y del cual se espera adelanten estudios para determinar la presencia en los ecosistemas del departamento.
El guardabosques Sergio Raúl Cruz Suazo, quien trabaja en predios para la conservación en el municipio de Génova, sigue siendo el protagonista de hechos destacados para la fauna del departamento. Al encuentro que en días recientes sostuvo con un roedor conocido como el Toro Bambú Colombiano (Olallamys albicadus), del cual solo se tienen 17 registros, se suma el avistamiento de otro roedor conocido como musaraña.
Esta vez, el acontecimiento se dio en la reserva El Mirador de propiedad de la alcaldía de Génova, que administra en comodato la Fundación ProAves, mientras realizaba uno de sus habituales recorridos en su labor como guardabosques.
“En la parte más alta a 3.000 metros de altura y cuando iba por el sendero alcancé a ver un animal entre el pasto del que inicialmente pensé que era un ratón porque tiene la fisonomía muy parecida. Cuando le logré ver el hocico me di cuenta que era otro animal por lo que decidí reaccionar para poder atraparlo con las manos logrando capturarlo para hacerle un registro audiovisual porque ese animal es muy esquivo, por ser de hábitos subterráneos es muy difícil hacer este tipo de avistamientos”, contó el guardabosques.
Al enviar las imágenes a biólogos expertos se dieron cuenta que se trataba de una musaraña y lo más importante aun es que esta era la primera vez que en el departamento del Quindío se hacía un registro en fotos y videos. “No me especificaron exactamente el nombre científico completo porque es difícil determinarlo. Para eso tendrían que colectarlo y hacerle un estudio en el cráneo para determinar la especie, pero en general en el departamento son muy pocos los avistamientos de esta especie”, expresó Cruz Suazo.
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Dijo que este roedor es muy importante dentro de los ecosistemas porque al ser de hábitos subterráneos ayuda a drenar el suelo para para que oxigene. Su vida permanece oculta entre los pastos y la tierra.
Son animales que viven debajo de la tierra, como lo hacen los topos, además, generan un campo magnético para ubicar las presas que hacen parte de su alimentación, sumado a su olfato que es muy desarrollado.
Sobre esta especie, el profesor investigador de la Universidad del Quindío, Hugo Mantilla Meluk, quien también es el director del Centro de Estudios de Alta Montaña y curador de la colección de mamíferos, manifestó que las musarañas cumplen funciones importantes como el control de población de invertebrados, asimismo, involucran oxígeno a la tierra y crean sistemas de drenaje de agua.
El director general de la Corporación Autónoma Regional del Quindío, José Manuel Cortés Orozco, expresó que, aunque no se han llevado a cabo investigaciones con esta especie, una vez conocido este importante registro sí será necesario empezar a hacer trabajos con miras a determinar su presencia en el Quindío.
“Una vez conocido este avistamiento que se convierte en un hecho histórico para la fauna del departamento, se hace necesario proyectar estudios alrededor de la especie”, dijo el representante de la autoridad ambiental de los quindianos.
Mientras eso ocurre, el guardabosques seguirá con orgullo trabajando desde una de las zonas más alejadas del departamento, pues el trabajo de conservación que realiza lo hace en una zona que está a más de 3 horas a caballo del casco urbano de Génova y un tiempo más largo si el recorrido se hace a pie.
